martes, 12 de julio de 2011

El Templo, La Hija del Herrero, El Perro Del Curtidor y La Varita De Los Deseos De Eurmal

      Esta aventura es lo más parecido a una comedia que he conseguido diseñar. Es una aventura corta y de baja intensidad pero con unos personajes no jugadores muy divertidos y unas situaciones bastante rocambolescas. La trama se inicia cuando un grupo de seguidores de Eurmal se infiltra en una ciudad hacíendose pasar por sacerdotes de Chalana Arroy para oficiar la celebración de la restauración del templo de todos los Dioses (Que los jugadores quemaron en una aventura anterior). Tras la misma aprovechan para quemar el templo (otra vez) y saquear sus reliquias, además de secuestrar a un perro y a una joven.

      Esta aventura, además, incluye un objeto mágico de lo más peculiar. Se trata de una particular varita de los deseos. Un objeto tan poderoso como peligroso. Gracias a este objeto, mis jugadores y yo hemos pasado momentos inolvidables.

5 comentarios:

Peter dijo...

Bajando ;)

Santiago dijo...

Me encantan las aventuras donde sale Eurmal!!
Piensas seguir publicando tu campaña de la isla de los grifos a trozos? yo tengo la mia en punto muerto por falta de ideas, pero vamos, con tres aventuras frescas me veo resucitandola...
Un saludo desde Glorantha hispana!

Samunosuke dijo...

Pues estoy recopilándolas poco a poco, la pena es que me faltan muchas. Antes de esta había dos o tres muy majas, pero ni idea de donde acabaron. A ver si te gusta la mini campaña que pone fin a mi versión de La Isla de los Grifos.

Artus Silenis dijo...

¡Qué cafres tus jugadores! :)
Y esa varita... ¿la usaron mucho?
¿Qué pasó la primera vez?

Samunosuke dijo...

La usaron y abusaron de ella a placer. A veces les salía bien y a veces pues no tan bien. Era como una especie de último recurso en caso de necesidad.
La primera vez que la usaron recuerdo que hicieron que lloviera pescado podrido. La organización Mundial de Perdedores lo interpretó como un augurio del apocalipsis y organizaron suicidios colectivos. Mala suerte, jejeje.